Por: Salvador Cosío Gaona
Cuánta razón tenia el actor afroestadounidense Will Smith, cuando declaró: “El racismo no está empeorando, solo es que ahora se está grabando». Y es que eso fue justamente lo que se pudo comprobar esta semana en el contexto en el que policías provocaron la muerte de George Floyd de 46 años de edad, con quien uno de los uniformados no tuvo piedad a pesar de que Floyd le pedía lo dejara respirar hasta que desfalleció frente a la gente que presenciaba y con sus celulares grababa la terrible escena. Desde el pasado lunes en que ocurrió la agresión y derivó en el fatal desenlace, George Floyd se ha convertido en símbolo de protestas de la comunidad negra en Estados Unidos, más específicamente en Minneapolis, en donde ya se han registrado un par de manifestaciones que han generado disturbios y saqueos en el sur del centro de la ciudad, con personas destrozando tiendas y prendiendo fuego a negocios y otros edificios.
El video grabado por Darnella Frazier, en el que se observa claramente cómo Floyd es sometido en el piso con su cuello bajo la rodilla del policía hasta perder el conocimiento ya ha dado la vuelta al mundo provocando toda clase de reproches hacia los uniformados que evidentemente abusaron de la violencia ejercida sobre el afroestadounidense.
Floyd, un ex guardia de seguridad, se ve esposado y desarmado, rogando por su vida y poco después queda inerte hasta que una ambulancia lo recoge del suelo para llevarlo al hospital en donde más tarde fue declarado muerto.
En el vídeo de 10 minutos, Derek Chauvin, el oficial blanco de 44 años que inmoviliza a Floyd, hace oídos sordos al propio detenido, pero también a los transeúntes que lo increpan por su violencia extrema.
Su compañero de patrulla, el corpulento Tou Thao, observa impasible y tratando de bloquear la visión a quienes pasan por la calle.
Según la policía, el hombre, de 46 años habría sido arrestado después de que los agentes recibieran una llamada para investigar el caso de una supuesta falsificación en la tienda Cup Foods. Mahmoud Abumayyaleh, dueño del negocio, le dijo a CNN que un trabajador llamó a la policía para denunciar a alguien que estaba utilizando un billete falso de 20 dólares, y luego vino la agresión ya relatada.
El Departamento de Policía de Minneapolis despidió esta semana a los cuatro uniformados involucrados en el arresto de Floyd. La causa de la muerte de Floyd no ha sido informada, y el incidente es investigado por las autoridades locales, estatales y federales.
Pero la familia de Floyd no está conforme con que solo sean despedidos los agresores y exige se les lleve presos bajo cargos de homicidio.
«Era un hombre temeroso de Dios, independientemente de lo que había hecho», dijo su hermana Bridgett Floyd a medios locales.
«Todos tenemos nuestros defectos. Todos cometemos errores. Nadie es perfecto», agregó.
«Es cruel como murió», declaró al Houston Chronicle, la madre de su hija de 6 años, Roxie Washington.
«Se lo han robado a mi hija», dijo.
George Floyd, originario de la ciudad de Houston, se dedicaba en su ciudad natal al baloncesto y fútbol.
También se hizo un nombre en la escena local de hip-hop, donde era más o menos conocido.
Pero al mudarse a Minneapolis empezó una nueva vida con un empleo de guardia de seguridad del restaurante latinoamericano Conga Latin Bistro, en el centro de la ciudad.
Sus compañeros le apodaron enseguida «Big Floyd». “Era alto y musculoso», dijo su compañero en el local, Vernon Sawyerr. “Era simplemente superamable. Cuando ves a alguien de ese tamaño, puede parecer imponente, pero era superdulce”.
De hecho, en 2017 y principios de 2018, Floyd también había hecho de guardia de seguridad en el refugio para personas sin hogar Harbour Light del Ejército de Salvación, en Minneapolis.
La ex estrella de la NBA Stephen Jackson se mostró en Instagram desconsolado por la pérdida de lo que para él era un hermano.
Ambos eran amigos muy cercanos y usaban como apodo la palabra «Twin» (gemelo).
«Me enfurece tanto que después de todas las cosas por las que pasaste y de que te comportaste lo mejor posible, te sacaron así», se lee en su cuenta.
Pero no solo amigos y familiares han mostrado su indignación, miles de personas, entre ellas celebridades y deportistas, no solo residentes de la Unión Americana, sino, a nivel mundial, han levantando la voz y puesto en alto el nombre de George Floyd a través de sus redes sociales.
Entre las celebridades que decidieron usar el poder de sus respectivas plataformas para emitir un mensaje de conciencia y deplorar el hecho cometido por el oficial de Minneapolis, se encuentran Justin Bieber, Cardi B, Kim Kardashian, Madonna, Kanye West, Penelope Cruz, Debby Ryan, Billie Eilish, P. Diddy, Beyoncé y Jessica Alba, y LeBron James, entre otros que exigen justicia y carcel para los agresores.
En tanto la frase “I can’t breathe” (No puedo respirar), palabras que repetía Floyd durante el incidente, se multiplican en distintas pancartas y camisetas en las protestas de Minneapolis como un lema de la violencia policial que sufren los afroamericanos en Estados Unidos.
«Estamos cansados. Demasiadas vidas se han perdido. Lo que vimos fue un linchamiento de un hombre negro», dijo Leslie Redmond, presidenta de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP), durante las protestas que se tornaron violentas por segunda noche consecutiva en Minneapolis.
Michelle Bachelet, alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, emitió un comunicado el jueves pidiendo a Estados Unidos que tome «medidas serias» para poner fin a los asesinatos.
«Este es el último de una larga serie de asesinatos de afroamericanos desarmados, cometidos por policías estadounidenses y gente armada. Lamento tener que sumar el nombre de George Floyd al de Breonna Taylor, Eric Garner, Michael Brown y tantos otros afroestadounidenses desarmados que murieron en los últimos años a manos de la policía. Las autoridades estadounidenses deben tomar medidas serias para poner fin a estos asesinatos”.
Quizá el texto de Madonna sobre lo ocurrido, sea algo que se deba tomar en cuenta para que no vuelvan a ocurrir abusos como el que nuevamente se ha registrado por parte de agentes en contra de hombres y mujeres afroamericanos.
«Ver a este policía sofocar a George Floyd con la rodilla en el cuello, esposado e indefenso, llorando por su vida con la cara en el piso es la cosa más repugnante y desgarradora que he visto en mucho tiempo. Este oficial sabía que lo estaban filmando y lo asesinó con arrogancia y orgullo. ¡Esto tiene que parar! Hasta que podamos superar el racismo en Estados Unidos, a nadie se le debe permitir portar un arma. Sobre todo policías.», señaló Madonna.
@salvadorcosio1
