La Agencia Espacial Europea (ESA) dio este jueves su visto bueno al lanzamiento a partir de 2030 de una nueva misión a Venus, EnVision, con la que se quiere tener una visión «holística» del planeta, desde su núcleo hasta la atmósfera superior.
Ese nuevo orbitador buscará determinar cómo y por qué Venus y la Tierra evolucionaron de forma tan diferente a pesar de tener aproximadamente el mismo tamaño y composición, hasta el punto de que Venus, en lugar de ser habitable, tiene una atmósfera tóxica y está envuelto en densas nubes ricas en ácido sulfúrico.