Dieciséis meses de pandemia y tres confinamientos después, Inglaterra amaneció este lunes un paso más cerca de la normalidad tras eliminar casi todas las medidas legales contra la covid, como llevar mascarilla o mantener la distancia social, a pesar del auge de contagios de coronavirus.
Después de semanas copando titulares y discursos políticos, llegó el «Freedom day» («Día de la libertad») y con él el fin de la desescalada en Inglaterra, inicialmente previsto para la última semana de junio y aplazado tres semanas por el avance de la variante delta.