Los incendios forestales que a lo largo de 2021 han devastado amplios terrenos en todo el mundo han dejado un total de 1.760 megatoneladas de carbono; además, en varias regiones se registraron los mayores niveles de emisiones, según datos del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copérnicus (CAMS).
Los registros se recogen por el Sistema Mundial de Asimilación de Datos sobre Incendios (GFAS) del CAMS desde hace 19 años.