Un hombre de Maryland que permaneció encarcelado injustamente durante 32 años por dos asesinatos que no cometió, incluyendo una década en el corredor de la muerte, demandó a ex agentes de las fuerzas del orden, aunque cuatro de los cinco identificados como acusados han fallecido.
John Huffington fue indultado en enero de 2023, por el entonces gobernador Larry Hogan, quien alegó mala conducta de la Fiscalía al otorgarle un indulto de inocencia total en relación con un doble asesinato ocurrido en 1981 en el condado de Harford. Una junta de Maryland aprobó una compensación de 2.9 millones de dólares para Huffington ese mismo año, durante la administración del gobernador Wes Moore.
Huffington declaró el jueves que “tomó muchos muchos años dolorosos, pero la verdad finalmente salió a la luz”. Con solo 18 años al momento de su arresto, afirmó que ninguno de sus padres llegó a ver ni comprender que su nombre había quedado limpio y estaba en libertad.
“Todos esos años que pasé tras las rejas dañaron y tensaron mis relaciones, me privaron de la posibilidad de formar una familia propia, de estar con mi madre cuando falleció y de un tiempo precioso con mi padre, quien tenía más de 90 años y padecía alzhéimer cuando finalmente fui liberado”, añadió.
Huffington, de 62 años, siempre mantuvo su inocencia. Salió de la Institución Patuxent en 2013 tras cumplir 32 años de dos cadenas perpetuas.
Huffington fue condenado dos veces por los llamados “Asesinatos del Día de los Caídos”. Diane Becker fue apuñalada hasta la muerte en su autocaravana, mientras que su hijo de 4 años, que se encontraba en el interior, resultó ileso. Joseph Hudson, el novio de Becker, recibió un disparo mortal y fue encontrado a pocos kilómetros de distancia. Un segundo sospechoso de los asesinatos testificó contra Huffington, fue declarado culpable de asesinato intencional y cumplió 27 años de prisión.
La Fiscalía se basó en un testimonio, posteriormente desacreditado, sobre cabello encontrado en la escena del crimen que, supuestamente, coincidía con el de Huffington.
Apeló a su primera condena en 1981, pero en 1983, un jurado lo declaró culpable de asesinato y fue condenado a muerte. Posteriormente, la Fiscalía conmutó la pena por dos cadenas perpetuas.
Ahora bien, cuando The Washington Post descubrió un informe del FBI en 2011 que revelaba que el agente que analizó las pruebas capilares en el caso de Huffington podría no haber utilizado datos científicos fiables, o incluso no haber analizado el cabello en absoluto, surgieron dudas sobre las pruebas del caso. El informe se había redactado en 1999, pero el fiscal estatal del condado de Harford, Joseph Cassilly, no se lo entregó a los abogados de Huffington.
Un juez del condado Frederick anuló las condenas de Huffington y ordenó un nuevo juicio en 2013, después de que presentara nuevas pruebas de ADN que no estaban disponibles en sus juicios anteriores. Cuando se analizó el cabello para detectar ADN más de 30 años después, los resultados mostraron que no era cabello de Huffington.
El Tribunal Supremo de Maryland votó unánimemente la inhabilitación de Cassilly en 2021. El tribunal determinó que ocultó pruebas exculpatorias en el doble asesinato y mintió al respecto en los años siguientes.
Cassilly, quien sostuvo que no hizo nada malo, se jubiló en 2019 y falleció en enero de 2025.
Su hermano, Bob Cassilly, quien actualmente es el director ejecutivo del condado Harford, declaró en un comunicado que su hermano era un héroe de guerra condecorado que resultó herido sirviendo a su país y se desempeñó como fiscal estatal del condado durante 36 años en silla de ruedas.
“Joe no puede defenderse en este asunto que data de hace décadas porque ya falleció, al igual que los demás acusados, excepto uno que tiene casi 80 años”, dijo Cassilly. “El Gobierno del condado Harford, donde actualmente me desempeño como ejecutivo del condado, no tiene ninguna participación en este caso; el condado nunca fue el empleador de los acusados”.
Huffington también demandó al fiscal estatal adjunto encargado de su caso, Gerard Comen, al Gobierno del condado Harford y a los detectives de la Oficina del Sheriff del Condado, David Saneman, William Van Horn y Wesley J. Picha. Todos, excepto Saneman, han fallecido, según la demanda presentada el 15 de julio en un tribunal federal de Baltimore.
Con información de CNN.