El robo de gas y sus consecuencias han crecido a marchas forzadas en México, después de que en los últimos tres años se encontraran aproximadamente el 60 % de las tomas clandestinas descubiertas a lo largo de los últimos 20 años.
«En el 2018 hubo 12.581 tomas clandestinas, en el 2019 hubo 13.136 y en 2020 subieron a más de 23.000 tomas clandestinas», lamentó en entrevista con Efe el presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas Licuado y Empresas Conexas (Amexgas), Carlos Serrano.