El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ordenó una reducción del 20 por ciento en el número de generales y almirantes de cuatro estrellas en activo, según un memorando divulgado por el Pentágono este lunes. La medida forma parte de una serie de recortes en el personal militar, que también incluyen la disminución de efectivos civiles en al menos un 5 por ciento, en línea con la estrategia de optimización y racionalización del liderazgo militar.
Desde la asunción de la administración del presidente Donald Trump a finales de enero, las autoridades han llevado a cabo diversos ajustes en la estructura del Departamento de Defensa, incluyendo despidos de oficiales de alto rango. En marzo de 2025, Estados Unidos contaba con 38 oficiales de cuatro estrellas y un total de 817 generales y almirantes en servicio activo.
El memorando detalla que Hegseth también ordenó reducir en un 20 por ciento el número de generales en la Guardia Nacional y en un 10 por ciento otros efectivos del Ejército. La iniciativa busca, según el documento, mantener la posición del país como la fuerza de combate más poderosa del mundo, promoviendo la eficacia, innovación y preparación ante futuros desafíos.
“Mediante estas medidas, mantendremos nuestra posición como la fuerza de combate más temible del mundo, instaurando la paz por la fuerza y garantizando una mayor eficacia, más innovación y preparación para los desafíos futuros”, indica el texto oficial. Además, se argumenta que los recortes tienen como objetivo “optimizar y racionalizar el liderazgo mediante la reducción del exceso de puestos de generales y oficiales de alto rango”.
Hegseth publicó un video en la plataforma X (antes Twitter), bajo el lema “menos generales, más soldados”, en el que afirmó que, aunque las fuerzas armadas durante la Segunda Guerra Mundial eran mucho mayores en tamaño, contaban con menos oficiales de alto rango. El secretario explicó que los recortes se implementarán en dos fases, comenzando por los oficiales de cuatro estrellas y los de la Guardia Nacional, y posteriormente seguirán con un recorte adicional del 10 por ciento.
El funcionario señaló que estas medidas no buscan “castigar a los oficiales de alto rango”, sino “maximizar la preparación estratégica y la eficacia operativa”. Durante una audiencia en el Senado en enero pasado, Hegseth había destacado la necesidad de reducir la burocracia en el Pentágono, con el fin de reclutar y administrar recursos de manera más eficiente.
Estos cambios ocurren en un contexto donde, en febrero, el expresidente Donald Trump destituyó sin explicaciones al general Charles Brown, jefe de Estado Mayor Conjunto, además de otros altos oficiales como las almirantes Lisa Franchetti y Linda Fagan, y varios abogados militares de alto rango. Las decisiones han generado críticas por parte de los demócratas, quienes temen una posible politización de las Fuerzas Armadas, a lo que Hegseth respondió que la administración actual coloca a los funcionarios donde considera conveniente.
Con información de La Jornada.