El juez Paolo Borsellino, icono de la lucha antimafia junto a su colega y amigo Giovanni Falcone, fue asesinado en Palermo hace 30 años en un momento de connivencia del Estado con la mafia, explica a Efe su sobrina Roberta Gatani, quien recuerda con tristeza que su tío «sabía perfectamente que iba a morir».
El 19 de julio de 1992, la «Cosa Nostra», la mafia siciliana, acabó con un coche-bomba con la vida de Borsellino y cinco escoltas -incluida la primera mujer policía muerta en Italia en acto de servicio- en la Vía D’Amelio, menos de dos meses después del asesinato de Falcone, su mujer y tres agentes en la autopista entre el aeropuerto y la capital siciliana, a la altura de Capaci.