El anuncio del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de dejar de vender crudo al extranjero en 2024 y contener la producción -hoy desplomada- de petróleo parece a primera vista un guiño al medioambiente, pero expertos advierten de que se debe más a un ajuste a la realidad petrolera del país.
«Lo que estamos viendo ahora es un poco curarnos en salud. Estamos curándonos en salud diciendo que ya no vamos a exportar petróleo cuando la realidad en un futuro muy cercano es que ya nadie va a querer nuestro petróleo», explicó este martes a Efe Daniel Chacón, experto en energía de la plataforma Iniciativa Climática de México.