Con la conquista española, los pueblos de América escondieron su politeísmo entre la simbología del catolicismo impuesto: «una fusión entre Jesús, María y el Dios del Maíz», resume a Efe la comisaria de una exposición en Jerusalén que desvela el uso de los «alimentos divinos» desde el arte precolombino hasta la actualidad.
Fueron el maíz, el cacao y el maguey más que alimentos para las civilizaciones Olmeca, Maya y Azteca. Constituyeron sus creencias, como muestran las 400 piezas -de la historia desde 1.500 a.C. hasta la actualidad- que la arqueóloga israelí de origen uruguayo, Yvonne Fleitman, ha dispuesto en el Museo de Israel para construir la historia socio-política de Mesoamérica.