Un camino enmarcado por dos filas de 500 esferas de navidad con los rostros de mexicanos desaparecidos reclaman que las autoridades del país atiendan con urgencia esta lacra por la que más de 90.000 personas permanecen en paradero desconocido.
«Esto es un acto de memoria, sabemos que en estas fechas todas las familias tenemos una mesa vacía, una silla vacía, un espacio que no sabemos cómo llenar (…) este acto de memoria es traerlos un poquito a nosotros», dijo Tranquilina Hernández, madre de Mireya Montiel, desaparecida en 2014.