Hoy 65 voluntarios de la empresa Cemex visitaron la Casa Hogar Villas Miravalle de DIF Guadalajara para celebrar una posada alegre llena de risas y juegos en la que hubo una original piñata, comida, baile, regalos y sana convivencia.
Hace un mes que los chicos escribieron cartas mencionando su regalo ideal y el personal voluntario de Cemex decidió participar adoptándolas y cumpliendo los deseos de los chicos.
Así, entre villancicos como “Los peces en el río”, “Campana sobre campana” y “Arre borriquito”, todos jugaron, platicaron, convivieron y cantaron con una atracción inusual que le encantó a los muchachos: Cemex llegó al lugar con una máquina revolvedora de material de construcción y que en lugar de cemento contaba con dulces en su interior, mismos que los chicos recogían conforme salían por los aires.
“¡Esto es lo que pedí!”, dijo feliz Carlos, uno de los chicos de villas Miravalle, quien recibió un par de tenis de marca conocida; emocionada, Patricia Vázquez, trabajadora de Villas Miravalle, dijo: “Estábamos ahí y me dio mucho sentimiento ver la emoción de estas personas que sin conocer a los niños, estaban muy emocionadas… fue un acto lleno de amor y se me salieron las lágrimas”.
Por su parte, al ver tan alegres a los chicos, la titular de Villas Miravalle, Elizabeth González, expresó: “Son una familia. Es lo que intentamos en DIF Guadalajara, que ellos sean como hermanos, alimentamos su interior. La posada de hoy fue muy especial y todos gozamos mucho”, dijo
Actualmente, 86 chicos habitan en la Casa Hogar Villas Miravalle por situaciones de maltrato o abandono.
Derivados de la Fiscalía y de la Procuraduría del estado y municipales, en el Hogar de Transición para la Niñez Villas Miravalle se les brinda acompañamiento integral a través de atención médica, psicológica y académica.
