Luego de que, a casi un mes, el presidente de México revelara que el avión presidencial ya tenía dueño, ya viajó rumbo a su nuevo hogar.
Y es que debemos recordar que vender en avión presidencial, fue uno de los objetivos de esta nueva administración, el cual logró y se hizo realidad.
La aeronave que no salía ni en rifa – haciendo alusión a la convocatoria de la Lotería Nacional para que alguien lo ganará— por fin encontró un lugar donde sí podrá elevar sus alas.
Fue durante una de sus conferencias matutinas, en abril, que el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que ya había un comprador interesado.
El Boeing 787-8 que fuera conocido por ser el famoso avión presidencial de México, despegó de San Bernardino, California, en Estados Unidos.
Llegó alrededor de las 7 de la mañana (hora local). Su destino final, el Aeropuerto Internacional de Dusambé, en Tayikistán.
Para comenzar con su nueva vida, el ex avión de México sufrió un ligero cambio de look, pues se le retiraron aquellos elementos tricolor que lo caracterizaban para cambiarlas por nuevas estampillas.
Asimismo, se le cambió la pintura y ahora luce los colores distintivos de Tayikistán, así como el nombre de la que fuera una de las repúblicas soviéticas. Por si fuera poco, sus placas también cambiaron a las OMD195, oficiales de su nuevo país
