Esta mañana el presidente municipal de Tlajomulco, Alberto Uribe Camacho estuvo presente en una visita a la casa en donde en días pasados se localizó una fosa clandestina en fraccionamiento Villa Fontana Aqua. Dicha visita fue encabezada por el Fiscal General del Estado, Raúl Sánchez Jiménez y la Fiscal Central, Marisela Gómez Cobos.
En el sitio, el presidente municipal escuchó de las autoridades estatales el avance en las investigaciones que se derivan del hallazgo de los cuerpos localizados en ese sitio y en otros puntos del municipio.
El Fiscal General y el Presidente Municipal coincidieron en que uno de los factores más importantes para que este tipo de situaciones se presenten en Tlajomulco, es la gran cantidad de viviendas que se encuentran en abandono. Al inicio de esta administración municipal se tenía una cantidad de 18 mil y se estima que actualmente hay 15 mil viviendas en abandono, mismas que en un entorno social adverso, se convierten en refugio de delincuentes.
En la reunión se llegó al acuerdo de establecer una mesa de diálogo de manera urgente entre el INFONAVIT, el gobierno del Estado y el gobierno de Tlajomulco, para que se defina una estrategia frontal para combatir el abandono de estas viviendas y desplazar la operación de grupos criminales que han optado por apoderarse de dichos espacios.
Durante la reunión Uribe Camacho fue enfático en señalar que las medidas tomó durante su administración para frenar la construcción de más viviendas de tamaño sumamente reducido como 45 o 60 mts2 en el municipio, parten de la insuficiencia de los servicios básicos, pero también del razonamiento de que si en este momento Tlajomulco cuenta con 15 mil viviendas sin ocupar, resulta absolutamente contradictorio seguir construyendo nuevas viviendas y evadir la atención del problema de las viviendas abandonadas. Recordó que parte de esas acciones significaron el revertir el uso de suelo de 800 hectáreas que ya estaban destinadas para construcción de viviendas e insistió en que la presente administración no se sobrepasará la autorización de 5 mil nuevas casas, cuando el promedio por trienio llegó en las últimas administraciones a más de 30 mil.
