Luego de ser ratificado con 49 votos a favor y 46 en contra en el Senado de Estados Unidos, Ronald Johnson rindió protesta como embajador en México, en un acto que contó con la presencia del embajador mexicano Esteban Moctezuma Barragán, quien le dio la bienvenida oficial al cargo.
El encuentro, divulgado en la cuenta verificada de Moctezuma en la red social X (antes Twitter), fue acompañado de una imagen del momento y de declaraciones en las que el diplomático mexicano expresó su apoyo a la nueva representación diplomática, resaltando la apertura y disposición de Johnson para fortalecer las relaciones bilaterales.
El nombramiento de Johnson se produjo en medio de una disputa acérrica en el Senado estadounidense, donde la ratificación fue casi igualada, reflejando las tensiones políticas entre republicanos y demócratas. La aprobación permitió que el diplomático asuma un cargo que ya desempeñó anteriormente en El Salvador durante la administración de Donald Trump.
Con una trayectoria que combina experiencia militar y en inteligencia, Johnson sirvió en las Fuerzas Especiales del Ejército de Estados Unidos y fue agente de la CIA durante más de 20 años. Su carrera en el ámbito militar incluye haber alcanzado el rango de coronel y participar en operaciones en regiones como América Latina y los Balcanes.
El expresidente Donald Trump destacó en su momento que Johnson trabajaría en estrecha colaboración con el futuro Secretario de Estado, Marco Rubio, para promover la seguridad y prosperidad estadounidenses mediante políticas exteriores centradas en el principio de «Estados Unidos primero».
Su llegada a la embajada estadounidense en México se produce en un momento en que la administración Trump ha intensificado medidas en materia de política migratoria y seguridad fronteriza, enfocadas en reducir el flujo de migrantes y el tráfico de drogas, particularmente el fentanilo.
Previo a su nombramiento en México, Johnson fue embajador en El Salvador (2019-2021), donde señaló que uno de sus principales objetivos sería fortalecer la cooperación con las autoridades mexicanas para frenar los flujos migratorios ilegales y gestionar la deportación de ciudadanos sin documentos en EE. UU.
Con una experiencia de más de tres décadas en el servicio militar y en inteligencia, Johnson se presenta como un representante con un perfil orientado a la seguridad y la política exterior de línea dura, en consonancia con las prioridades de la administración de Trump en la región.
Con información de Infobae.