Nadie duda del legado musical dejado tras la partida física de Prince. Aunque para muchos su muerte fue sorpresiva, dejará para la eternidad una serie de clásicos como el disco Purple Rain.
Pero para beneficio de sus fans el músico dejó varias canciones inéditas dentro del complejo Paisley Park, en Minneapolis.
“Sabemos que hubo una inmensa cantidad que aún no se libera, en gran medida álbumes y proyectos que hizo y desechó. Creo que la mayor pregunta es ¿qué disposiciones se hicieron y quién es su albacea musical?», dice el periodista Alan Light en una publicación de USA Today.
El compositor Brent Fischer estima la bóveda del artista contiene cientos de canciones. “Esto es enorme. No es como encontrar un álbum de los Beatles desconocido. Hay material suficiente para, literalmente, docenas de álbumes”.
Recientemente la publicación The National Enquirer aseguró que Prince era portador del VIH citando a una fuente dentro de la industria. “Se estaba preparando para morir, estaba en mala forma. Los doctores le dijeron que su conteo sanguíneo estaba inusualmente bajo y que la temperatura de su cuerpo había descendido peligrosamente. Tenía deficiencia de hierro, estaba muy débil y con frecuencia desorientado. Raramente comía y cuando lo hacía lo vomitaba”, citaron.
En lo que los resultados de la autopsia se dan a conocer las especulaciones seguramente seguirán surgiendo. Además entre la información que sigue circulando sobre el cantante está la confirmación que no dejó un testamento por lo que su hermana Tyka presentó una petición para que un juez designe a un administrador para sus bienes.
