Pensar en salir temprano de la oficina y sin pendientes parece imposible. Se cree que las largas jornadas laborales son más productivas, entre más se trabaja más se hace, sin embargo
la mayoría de las personas pierde tiempo valioso en la oficina
y cuando se acerca la hora de salir quiere terminar con su trabajo diario y muchas veces acarrea ese trabajo a casa.
Es posible terminar con los pendientes de la oficina gracias a estos hábitos que deberás adoptar en tu rutina laboral.
1. Planifica tu día
Organiza tu trabajo diario, piensa en todo lo que tienes que realizar durante el día y fija horarios, la hora de entrada, hora de salida, de comida, hacer llamadas, revisar correos, trata de apegarte a ellos. Mentalizarnos en la hora que nos queremos ir es bueno, ya que nos ayuda a fijar límites de trabajo y alcanzar la meta de irnos a la hora establecida.
2. Haz lo más importante primero
Una vez organizado el trabajo, comienza por lo más importante y urgente. Revisar constantemente el correo electrónico puede significar una gran pérdida de tiempo.
3. Evitar distracciones
Es inimaginable realizar un trabajo sin una computadora y/o Internet, la gran mayoría de trabajadores tienen acceso desde su trabajo. Por ello, las distracciones en Internet especialmente en redes sociales son una tentación muy grande. Evitarlas al máximo será sin duda indispensable para terminar con nuestro trabajo diario.
4. Creernos multitasking
Pensamos en hacer varias cosas al mismo tiempo, pues nos ahorra tiempo y esfuerzo, sin embargo no es nada fácil lograrlo. Ya que no se le presta la atención necesaria a cada cosa y terminamos haciéndolo a medias, y por ende nos tardamos más en realizar ambas cosas que por separado. Es muy común creer que podemos hablar por teléfono y contestar un correo al mismo tiempo, la realidad es que seguramente encontraremos errores en la redacción del correo y no habremos puesto mucha atención en la llamada telefónica.
5. El trabajo seguirá allí mañana
Siempre habrá cosas en la lista de pendientes, surgen situaciones de última hora, sin embargo esos pendientes pueden esperar a mañana, pues lo más importante ya se realizó durante el día. Piensa en que siempre habrá cosas por hacer en la oficina, pero no debemos ser esclavos de ellos.
