Como desde hace más de 35 años durante los primeros días del mes de enero de cada año, la Virgen de Zapopan visitó los reclusorios del penal de Puente Grande, donde las personas privadas de la libertad y de creencias católicas, recibieron la imagen con alegría y júbilo.
Al primer lugar a donde arribó la imagen conocida también como La Generala, fue a la Comisaría de Prisión Preventiva, donde las personas recluidas en ese centro la acompañaron con cánticos y rezos durante su travesía hasta la capilla que se encuentra al interior.
Lo mismo sucedió en la Comisaría para Sentenciados, así como en la Comisaría de Reinserción Femenil, donde reclusos y reclusas, respectivamente, montaron vallas desde el ingreso del centro hasta los oratorios de cada lugar, donde, durante el recorrido, era alabada y aplaudida por los creyentes.
Cabe señalar que mientras realizaba su traslado entre la Comisaría de Prisión Preventiva y el centro para sentenciados, la imagen realizó una escala en las oficinas generales de la Fiscalía de Reinserción Social, donde el encargado de Pastoral Penitenciaria, Víctor Olegario Corona Angulo, ofreció un mensaje al personal: “La visita de La Virgen de Zapopan a los reclusorios es una tradición que viene a dar aliento y tranquilidad a los creyentes que trabajan aquí como a los que se encuentran recluidos”.
Asimismo comentó que durante la visita a los centros, la devoción de los fieles es tanta, que en cada lugar que pernocta se siente un ambiente distinto, un clima de tranquilidad entre las personas, “se vuelve día de alegría porque se hace más llevadera la estancia entre los católicos”, y agregó que percibe que esa misma tranquilidad se respira entre el personal.
Olegario Corona señaló que fue en 1979 cuando la Virgen de Zapopan realizó su primera visita a los centros penitenciarios de Oblatos, y desde entonces no ha faltado una sola ocasión a su cita con las personas privadas de la libertad llevando consigo siempre fe y esperanza para los que la necesitan.
Una vez que La Generala concluyó su visita a los reclusorios estatales de la zona metropolitana, se trasladó al Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico (antes Tutelar), donde también estuvo una noche para luego visitar a los menores de edad que se encuentran cumpliendo una sentencia en el Centro de Atención Integral, o mejor conocido como Granja.
