Caracas acusa a Estados Unidos de mantener en cautiverio a 66 menores venezolanos, separados de sus familias en medio de un controvertido proceso de deportación. El gobierno venezolano exige la inmediata entrega de los niños a las autoridades nacionales para facilitar su retorno junto a sus seres queridos, en una escalada diplomática que evidencia las tensiones entre ambos países.
Camila Fabri, presidenta del plan gubernamental Vuelta a la Patria, afirmó este martes que la cifra de menores secuestrados en EE.UU. «cada día sube» y calificó la situación como «muy preocupante». Fabri, esposa del empresario colombiano Alex Saab, señaló que esta política de separación y retención «es una medida cruel e inhumana» y prometió que «los vamos a traer de vuelta a todos los 66 niños».
Durante una manifestación, un grupo de madres leyó una carta dirigida a la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, solicitando su intervención para garantizar la liberación de los menores, muchos de los cuales permanecen en hogares de acogida. Hasta la fecha, 21 niños, entre ellos Maikelys Espinoza, han logrado regresar a Venezuela tras ser deportados y participar en canjes humanitarios.
El gobierno chavista ha intensificado sus reclamos, realizando manifestaciones y desplegando una fuerte campaña mediática en los medios oficiales para exigir el retorno de los menores. Camila Fabri, de nacionalidad italiana, informó además que en 2025 han sido repatriados 10.631 migrantes venezolanos, incluyendo deportados de EE.UU. y migrantes varados en México, a través del plan Vuelta a la Patria, en un esfuerzo por fortalecer los lazos y la protección de los venezolanos en el exterior.
