Investigadores de la Universidad de Guadalajara presentan un análisis exhaustivo sobre las inundaciones en la región, que muestra un aumento en la frecuencia y gravedad de estos incidentes en las últimas décadas. El Mapa Integral de Inundaciones del Área Metropolitana de Guadalajara documentó un total de 5,042 eventos desde 1990, con un notable repunte en la última década, evidenciando la creciente vulnerabilidad de la zona ante fenómenos hidrometeorológicos.
El estudio identifica 580 zonas de riesgo, de las cuales 180 son catalogadas como de alto peligro, debido no solo al volumen de agua que pueden acumular, sino también a la rapidez con la que fluye, lo que incrementa el potencial de daños y riesgos para la población, según advirtió el profesor Luis Valdivia Ornelas, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).
Los datos revelan que Guadalajara y Zapopan concentran más del 80 por ciento de los reportes de inundación, con un incremento significativo en los incidentes: de 164 casos en 2015 a 320 en 2023. Entre las zonas críticas se encuentran Las Águilas, Plaza del Sol y diversos pasos a desnivel, como el de 8 de Julio y Washington, que representan puntos vulnerables ante las lluvias intensas.
Valdivia explicó que muchas de estas inundaciones no se deben únicamente a la acumulación de basura en los sistemas de drenaje, sino a la incapacidad de los canales existentes para gestionar el volumen de agua generado por la urbanización acelerada en zonas altas. Un ejemplo de ello fue la situación ocurrida en 2023 en el área del Garabato, donde las obras de infraestructura no lograron contener el exceso de agua, evidenciando la necesidad de una planificación integral y efectiva para reducir los riesgos en el futuro.