Washington D.C., 10 de septiembre de 2025 — Un tribunal federal resolvió que Lisa Cook, integrante de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal (Fed), podrá continuar en su cargo mientras enfrenta el proceso legal derivado del intento de destitución promovido por el presidente Donald Trump. El fallo representa un revés para la Casa Blanca, que busca ampliar su influencia sobre el organismo autónomo encargado de definir la política monetaria en Estados Unidos.
La decisión judicial, que podría ser apelada, se sustenta en el principio de independencia institucional de la Fed, establecido por el Congreso para protegerla de presiones políticas. Los abogados de Cook argumentaron que el despido sería ilegal, al no haberse cumplido el requisito de “causa justificada”, ni haberse otorgado a la funcionaria el derecho a audiencia.
El intento de remoción se originó tras acusaciones de presunto fraude hipotecario, relacionadas con la compra de dos propiedades en 2021. Según la denuncia, ambas fueron registradas como residencias principales, lo que habría permitido acceder a condiciones preferenciales de crédito. Cook niega las acusaciones y no ha sido imputada por ningún delito.
El caso ha generado preocupación entre economistas y analistas financieros, quienes advierten que una mayor subordinación de la Fed al Ejecutivo podría derivar en decisiones monetarias orientadas a objetivos políticos, como mantener tasas de interés artificialmente bajas. Esto, señalan, podría acelerar la inflación y elevar los costos de financiamiento a largo plazo.
Actualmente, la tasa de referencia se ubica en 4.3 %, y aunque se prevé una reducción en la próxima reunión del comité de política monetaria, las estimaciones apuntan a un ajuste más moderado que el deseado por Trump, quien ha expresado públicamente su preferencia por tasas cercanas al 1.3 %.
Cook, primera mujer afrodescendiente en ocupar un puesto en la Junta de la Fed, cuenta con una destacada trayectoria académica y profesional. Antes de su nombramiento, impartió clases en la Universidad Estatal de Michigan y en la Escuela de Gobierno Kennedy de Harvard.
La controversia se desarrolla en un contexto de tensión institucional, marcado por la renuncia de la gobernadora Adriana Kugler y la nominación de Stephen Miran como su posible reemplazo, lo que podría modificar el equilibrio interno de la Junta. La Corte Suprema ha reiterado que los gobernadores de la Fed sólo pueden ser removidos por causas graves, no por diferencias políticas.
