Reynosa, Tamaulipas – La administración estatal de Tamaulipas ha rechazado categóricamente las afirmaciones sobre la existencia de un «campo de exterminio» y un «crematorio clandestino» en el municipio de Reynosa, en respuesta a las recientes denuncias realizadas por el colectivo Amor por los Desaparecidos de Tamaulipas. La controversia surgió tras el hallazgo de fragmentos óseos en varias zonas de la ciudad, lo que llevó a las buscadoras a especular sobre la posible existencia de estos atroces lugares.
Jorge Cuéllar, secretario ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, emitió un video en el que se refirió a las informaciones difundidas por los colectivos de búsqueda y los medios de comunicación, subrayando que las indagatorias realizadas por la Fiscalía General de Justicia no respaldan tales afirmaciones. Cuéllar indicó que, durante las diligencias de búsqueda llevadas a cabo el pasado lunes 10 de marzo, se inspeccionó un predio en construcción que contenía materiales de albañilería y una caja tipo horno con insignias de una funeraria, pero sin evidencias de actividades ilegales.
El comunicado emitido por la Vocería de Seguridad de Tamaulipas enfatiza que no se encontraron restos óseos ni olores fétidos que pudieran sugerir la existencia de un crematorio o un campo de exterminio. «La propiedad corresponde a una obra negra de la sucursal de una empresa de funerales», se indicó en el documento.
A pesar de las aclaraciones, el colectivo Amor por los Desaparecidos había manifestado que en el lugar se habían encontrado restos humanos calcinados y otros indicios de violencia extrema. En respuesta a estos hallazgos, la Fiscalía mencionó que se habían localizado fragmentos óseos en tres zonas distintas de Reynosa, las cuales están siendo analizadas por especialistas para determinar su origen.
Cuéllar también expresó su preocupación por la forma en que estos hechos han sido presentados por los medios, calificando la situación de «magnificada de manera sensacionalista», y acusando a los colectivos de buscar atención mediática a partir de un contexto de violencia en otros estados, como el reciente caso en Jalisco.
Por su parte, la Fiscalía se comprometió a continuar trabajando en conjunto con las autoridades y los colectivos en la búsqueda de personas desaparecidas, reiterando su voluntad de brindar apoyo a las familias afectadas por esta problemática.
El tema de las desapariciones en México sigue siendo un asunto delicado y complejo, en un contexto donde los colectivos de búsqueda juegan un papel crucial en la localización de sus seres queridos, mientras que las autoridades enfrentan el desafío de proporcionar respuestas claras y efectivas a la sociedad.
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