El Gobernador Enrique Alfaro reconoció ayer que la solución al problema de abasto de agua para la Metrópoli, trazada durante su Administración junto con el Gobierno federal, no fue la óptima, sin embargo, era la que podía ejecutarse.
Al asistir a la toma de protesta del nuevo Consejo Directivo del Colegio de Ingenieros Civiles de Jalisco (CICEJ), el Mandatario estatal invitó al gremio a que acompañen el cierre de proyectos en los dos años que le restan a su Administración, entre ellos los relacionados con el abasto y saneamiento de agua.