Un hombre que desapareció hace más de dos meses en el Mar de Okhotsk fue encontrado con vida cerca de la aldea de Ust-Khairyuzovo, en el extremo oriente de Rusia. Mikhail Pichugin, de 46 años, es el único sobreviviente de una travesía que comenzó el pasado 9 de agosto y que terminó en tragedia para su hermano y sobrino de 15 años, quienes también viajaban en la embarcación.
Los tres partieron desde el cabo Perovsky, en el distrito Nikolaevsky del territorio de Khabarovsk, con destino al distrito de Okhinsky en la región de Sakhalin. Sin embargo, poco después de iniciado el viaje se perdió todo contacto con ellos, lo que desató una intensa búsqueda de las autoridades rusas. Durante más de dos meses, se rastrearon 55 mil kilómetros cuadrados del Mar de Okhotsk y 2 mil kilómetros de costa, pero los resultados no fueron alentadores.
Finalmente, el 14 de octubre, un barco pesquero llamado “Ángel”, localizó la lancha a la deriva cerca de Ust-Khairyuzovo, en la costa de Kamchatka mientras patrullaba la zona. “Lo vimos en el radar y al principio pensamos que era una boya o restos pequeños”, comentó un miembro de la tripulación. Al acercarse, se dieron cuenta de que se trataba de una embarcación y que había una persona a bordo.
Mikhail Pichugin fue rescatado en estado de shock y trasladado a un hospital en Magadán, donde su estado fue considerado estable. Según el Dr. Yuri Lednev, jefe interino del hospital regional, Pichugin no corre peligro de muerte, aunque perdió 50 kilos durante los 66 días que pasó a la deriva.
El hombre relató que el motor del catamarán falló, lo que hizo que la embarcación quedara fuera de control. Aunque logró sobrevivir, lamentablemente no pudo salvar a su hermano y a su sobrino, quienes murieron en circunstancias que aún están bajo investigación. Pichugin, pese a todo, conservó los cuerpos de sus familiares en la embarcación.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia del Territorio de Khabarovsk informó que desde el 18 de agosto se habían desplegado varios aviones, incluidos cuatro de búsqueda y rescate, para rastrear el Mar de Okhotsk en un intento por localizar a los desaparecidos. A pesar de los esfuerzos, la búsqueda no rindió frutos hasta que el barco pesquero, irónicamente llamado «Ángel», encontró a Pichugin.
La Fiscalía de Transportes del Lejano Oriente está investigando las causas del incidente y ha abierto un caso penal por violación de las normas de seguridad en la navegación, lo que resultó en la muerte de dos personas por negligencia. Las autoridades aún buscan esclarecer los detalles del accidente y determinar las causas exactas de las muertes.