Prueba de Fuego
Por Guillermo E. Quiroga Madrigal
Para este 2019, cuando cumpla seis meses de haber asumido la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador y su partido MORENA, tendrán una prueba de fuego. En cinco entidades federativas se llevarán a cabo elecciones.
Baja California será la entidad donde se vivirá el mayor proceso, ya que se elegirá al nuevo gobernador, cinco presidentes municipales y 25 diputados del Congreso.
En tanto en Aguascalientes, solo se renovarán 11 ayuntamientos, y en Durango serán 39; en Quintana Roo se votará para seleccionar a los 25 diputados que integrarán el Congreso del estado y en Tamaulipas se disputarán 36 curules para integrar la legislatura local. Mención aparte merece Puebla, donde también habrá comicios extraordinarios a la gubernatura, por el fallecimiento de la gobernadora, Martha Erika Alonso.
Aún faltan seis meses para los comicios, sin embargo el Presidente López Obrador ya carga desde antes que asumiera su mandato, un desgaste iniciando con la “consulta ciudadana” sobre la continuación en la construcción del nuevo aeropuerto en Texcoco, realizada en octubre del 2018 ya como presidente electo. La cancelación de la misma arrojó infinidad de inconformidades por parte de expertos, quienes bautizaron dicha decisión como el “error de octubre”.
Además del impacto en la productividad al cancelar la única opción viable para expandir la capacidad aeroportuaria de la zona metropolitana de la Ciudad de México, las multas financieras y la pérdida del capital ya invertido alcanzarían cerca de 6.3 mil millones de dólares, equivalentes al cero punto cinco por ciento del PIB, incluyendo más 1.3 mil millones de dólares de recursos públicos ya devengados.
Otro desgaste innecesario del Presidente, fue la forma de descalificar la elección en Puebla en donde enfatizó que había sido un cochinero, a pesar de haberla validado el Tribunal. Dijo que no visitaría Puebla por no haber condiciones para hacerlo, que su partido desconocía a la gobernadora panista Martha Erika Alonso; ese no es el comportamiento de un Presidente.
También la estrategia y los argumentos que ofreció el Gobierno de México ante la escasez de gasolina en los estados de Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Nuevo León, Puebla, Estado de México y Aguascalientes, ha dejado mucho que desear.
La estrategia fue criticada y señalada como fallida, así lo reconoció el Presidente de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros, Pablo González, quien dijo que el desabasto de combustible que se registra en Jalisco no se debe al huachicoleo, sino a las medidas administrativas del Gobierno Federal contra este delito. Textualmente dijo: “Esto sabemos que no fue toma clandestina, son tal vez medidas administrativas que está tomando el Gobierno de la República con lo que todo mundo ya conoce con el huachicol que se está atacando a fondo y nosotros lo aplaudimos, como gasolineros, pero que ahorita se tiene el problema de que no hay producto en los tanques de Pemex y el poliducto no tiene hasta el momento una sola gota de gasolina”.
La mesa está servida para que los partidos políticos y los independientes pongan la carne al asador y sepan aprovechar con argumentos sólidos. Que presenten buenos candidatos, ante el desgaste que lleva ya el Presidente López Obrador, de lo contrario la inercia que viene arrastrando desde las elecciones del 2018 el partido en el poder Morena, lo puede capitalizar con los triunfos en los próximos comicios, con carro completo y sin despeinarse.
Esperemos en julio de este año, para ver si las acciones emprendidas por López Obrador lleven a su partido Morena a ganar las elecciones en puerta, o de plano pagarán la factura. Una derrota electoral para Morena, a unos meses de asumir el máximo poder, sería una catástrofe para el gobierno en turno, lo que haga o deje de hacer el Presidente se verá reflejado en las urnas. La moneda está en el aire, la primer prueba de fuego electoramente hablando para López Obrador y su partido Morena ya arrancó, es tiempo de esperar…Seguimos en este Reloj de Arena.
