Por: José Ángel Gutiérrez
Los señalamientos de Enrique Alfaro sobre supuestas fallas graves en la construcción de la Línea 3 del Tren Ligero, a través de cinco preguntas que lanzó vía redes sociales a Enrique Peña Nieto, obligan a ambas partes a sustentar -con pruebas documentales- quién tiene la razón y en su caso, quién miente.
No se trata de exigir por exigir. Es lo menos que merece la sociedad jalisciense y, principalmente, quienes harán uso de esa importante alternativa de transporte que cruzará casi de extremo a extremo por tres municipios metropolitanos (Zapopan, Guadalajara y Tlaquepaque) y conectará además con las otras dos líneas ya existentes.
El gobernador electo, deberá sustentar sus dichos y señalamientos, ya sea con pruebas documentales o con testimonios de quienes son parte de la obra. En tanto, el Presidente -y su multi cuestionado Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza- deberán también en su caso, demostrar que la construcción está hecha a conciencia y que no representa peligro alguno de accidentes como el ocurrido en el Paso Express de Cuernavaca, Morelos, donde un socavón provocó la muerte de dos personas a causa de una mala planeación y ejecución de la obra o como en la Línea 12 del Metro en la Ciudad de México, donde debieron ser sustituidos 3.2 kilómetros de vías por representar peligro inminente en las curvas (esta obra a cargo del gobierno de Marcelo Ebrard, próximo Secretario de Relaciones Exteriores).
No podemos quedarnos en las declaraciones. Urge una revisión a conciencia y, esperemos, con la participación abierta de especialistas y técnicos. Lo ideal es que se integren los colegios y asociaciones de ingenieros y que en este caso, impere la verdad -reitero- por el bien de los usuarios.
Jalisco y en este caso la Zona Metropolitana de Guadalajara, merece obras bien hechas. Ya mucho se ha padecido durante años a causa de esa obra, para que ahora salgan solo con un “disculpe usted”. Si se muestran errores, lo menos que se espera -además de su reparación- es que se sancione a los responsables.
Cabe recordar que la noche de este lunes 19 de Noviembre, el gobernador electo Enrique Alfaro publicó en sus redes sociales lo que definió como “Cinco preguntas al Presidente Enrique Peña Nieto en el marco de su visita para entregar las obras de la #Línea3 del Tren Eléctrico en Guadalajara”.
En el escrito le pregunta si está enterado de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes le notificó a las empresas constructoras de la Línea 3 del Tren Eléctrico que los neoprenos instalados (que sirven como amortiguadores que evitan las vibraciones entre columnas y trabes) fallaron y tendrán que ser reemplazados por unos nuevos.
También si está consciente de que eso implicaría levantar de nuevo las trabes (desarmando las vías y la red eléctrica que ya están instaladas) para poder corregir el error cometido en los estudios de laboratorio hechos por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Exigió se aclare lo que tales reparaciones costarán, su duración y qué garantías habrán de que la Línea 3 no representará riesgo para los usuarios.
Al cuestionar al todavía primer mandatario si está seguro que no habrá más fallas, también le preguntó si empresa Neoprenos Moldeados S.A. de C.V. no es la misma que suministró los neoprenos del Tren México-Toluca.
Se trata de preguntas que sí merecen urgente respuesta. Respuesta y sustento de quien las plantea y de quien incluyó esa importante obra entre los proyectos prioritarios de su administración. No queremos declaraciones, queremos pruebas.
