Harto de que influencers llegaran a su local pidiendo comida gratis a cambio de publicidad, un chef de España, identificado como Santi Temblador, decidió jugarles una pequeña broma para enseñarles una lección, acontecimiento que se volvió viral.
Los hechos ocurrieron en el restaurante, El Cuelgue, cuando dos creadores de contenido ofrecieron al chef la oportunidad de colaborar con el fin de obtener comida gratis a cambio de promocionar el lugar. Santi aceptó, pero en realidad tenía otros planes.
Recibió a sus invitados, los sentó y preparó una cena inusual: un pan con jamón y aceitunas. Como si fuera una torta, el chef les ofreció este platillo y los comensales empezaron a tomar fotografías, sin embargo, después de que se acabaron el aperitivo, preguntaron qué más habría.
Cuando solicitaron al chef el segundo tiempo, este les respondió que eso era todo lo que obtenían los que querían comer gratis y solo les ofreció un vaso de agua simple. Decepcionados y avergonzados, los individuos salieron del lugar.