La investigación por el asesinato del ex primer ministro japonés Shinzo Abe continuó este miércoles con un amplio despliegue policial en el lugar del atentado, y ante las incógnitas por las motivaciones no políticas del presunto asesino y la fallida actuación de las autoridades.
La policía japonesa envió este miércoles a unos 50 investigadores a buscar los restos de las balas empleadas durante el atentado que acabó con la vida de Abe el pasado viernes, en una investigación a gran escala en la ciudad de Nara (oeste de Japón).