Por: Lucy Pérez Camarena
Nadie quisiera escuchar nunca un diagnóstico fatal, sin embargo todas las personas sumos susceptibles a padecer cualquier enfermedad; el cáncer es esa otra pandemia silenciosa que no avisa y está causando muchas víctimas.
En este mes que recordamos la lucha contra el cáncer de mama, quisiera reconocer a todas las personas que desde distintos ámbitos (gubernamental, organizaciones de la sociedad civil, voluntariado, activistas), entregan parte de su tiempo a acompañar emocionalmente a pacientes con este u otro tipo de cáncer.
En particular recuerdo a una gran guerrera que conocí, estaba ya diagnosticada con un pronóstico muy severo y con nada de esperanzas, sin embargo hasta el último momento se mostró feliz, amaba la vida y una semana antes de trascender, todavía tuvo aliento para acompañarnos en una conferencia para hablar acerca de la importancia de la prevención oportuna.
El cáncer de mama es una enfermedad curable si se detecta a tiempo, por ello desde hace muchos años durante el mes de octubre se realizan grandes esfuerzos por visibilizar la importancia del auto cuidado.
En distintos países y ciudades se iluminan los edificios más emblemáticos para que al hacerlo recordemos no solo la prevención, sino también a todas las personas que no pudieron ganar esta batalla y han partido de este mundo.
Existen diversas iniciativas globales desde las cuales se busca sensibilizar a la población femenina para que también se rompan barreras culturales que aun impiden que las mujeres sean examinadas por ejemplo por otras personas.
El cáncer de mama sigue siendo en nuestro país una de las principales causas de muerte en las mujeres, por ello es importante no escatimar esfuerzos para brindar información oportuna en todos los rincones de nuestras comunidades.
Hoy, a más de 10 años de distancia quisiera recordar los grandes esfuerzos que en nuestro estado han realizado en el tema el Consulado Americano, el Instituto de Cancerología, el extinto Instituto Jalisciense de las Mujeres, la mesa interinstitucional de salud que aglutinaba s entregadas organizaciones de la sociedad civil, el sector salud y la iniciativa privada, quienes lograron incidir en la NOM 041 al incorporar como parte de los cuidados en pacientes con cáncer el acompañamiento emocional.
El mes rosa, mes de octubre, no es más que un recordatorio de que todas las personas estamos expuestas ante una situación de salud, por ello también siempre será importante apelar a la sensibilidad de quienes podemos encontrarnos cerca de un paciente que sufre esta u otra enfermedad.
El cáncer de mama nos debe recordar también que no siempre significa muerte sino vida, ya que muchas personas logran sobrevivir a esta enfermedad y esa oportunidad representa una nueva esperanza.
