Una protesta de trabajadores de los medios públicos de Argentina, la mayoría de ellos periodistas, fue dispersada por la policía con gases lacrimógenos, mientras reclamaban incrementos salariales acordes con la inflación en medio de la crisis económica que padece el país.
En la movilización participaron trabajadores de Radio Nacional, la Televisión Pública y la agencia Télam, en donde este año el gobierno despidió a 357 personas, aunque existen órdenes judiciales para que restituya a cientos de ellos.
La protesta se llevó a cabo frente al Centro Cultural Kirchner (CCK), ubicado en el centro de esta capital, en donde tiene sus oficinas Hernán Lombardi, titular del Sistema de Medios Públicos.
Las autoridades desplegaron un fuerte operativo policial, que incluyó efectivos sin identificación, y que cerraron el paso a los trabajadores cuando llegaban al CCK, hasta que comenzaron a lanzar gases lacrimógenos y a golpear con palos a los manifestantes.
El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) explicó en un comunicado que la manifestación fue completamente pacifica y que los trabajadores fueron rodeados y atacados sin motivo alguno.
“Responsabilizamos al gobierno nacional y al gobierno de la Ciudad”, advirtió el Sipreba, que exigió que los ministros de Seguridad del país, Patricia Bullrich, y de la capital, Diego Santilli, “den explicaciones por la violencia desplegada por las fuerzas policiales”.
“Venimos pidiendo una mesa de diálogo para poder discutir el fin del congelamiento salarial, ya que durante 2018 los trabajadores/as de los medios públicos no tuvieron ninguna recomposición salarial paritaria”, apuntó la organización.
La situación laboral es particularmente grave porque este año, en Argentina hubo una inflación de alrededor del 50 por ciento, pero los trabajadores del Estado no recibieron actualización alguna en sus haberes.
Después de la represión, y ante la persistente negativa del gobierno en actualizar salarios, renunció la directora de Radio Nacional, Ana Gerchenson.
