El presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, hizo un llamado al Congreso para que en la próxima discusión del Código en materia procesal civil se reformulen y reglamenten los procesos familiares para que se apliquen los criterios elaborados por la Corte, en aras de proteger el interés superior de los niños, niñas y adolescentes.
Al inaugurar el Curso de Protección Jurisdiccional de los derechos de la niña, niño y adolescentes, en coordinación con la Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia) y la Universidad Diego Portales de Chile, explicó que México y la Suprema Corte trabajan por garantizar los derechos de los niños como sujetos y no como objetos.
«Se espera que los legisladores tomen en cuenta los criterios de la Corte y se logre una buena reglamentación» en la materia, señaló.
El ministro Zaldívar indicó que los jueces tienen un compromiso de defender los derechos de todos y de los más vulnerables, como son los niños, niñas y adolescentes, en cualquiera que sea su condición, discapacitados, migrantes o aquellas que los coloquen en la indefensión.
Comentó que la Suprema Corte ha protegido los derechos humanos y avanza en el ámbito procesal penal, en la presunción de inocencia, se avanza en favor de las minorías, en los matrimonios igualitarios, en la protección de pueblos indígenas y en garantías para la libertad de expresión.
Donde la Corte ha profundizado es en el derecho familiar, específicamente en lo que tiene que ver con el interés superior de los niños, niñas y adolescentes.
La Corte, dijo, ha generado un precedente muy importante, ya que ahora los niños ya son «sujeto de derecho y no objeto», ahora los jueces tienen la obligación de proteger el interés superior de los niños con base en esos nuevos precedentes.
Refirió que la Corte buscó que en los juicios familiares donde trata la custodia o patria potestad de un menor, antes se escuche a esos niños con base en nuevas técnicas psicológicas, porque no es lo mismo tratar a un menor que a un adulto.
Otro aspecto es establecer que no siempre la realidad biológica está por encima de lo que más conviene; «hemos tenido casos en los que se ha privilegiado a padres adoptivos o a quienes se les había dicho que era el padre y no fue así, pero se les ha dado la custodia para privilegiar siempre lo que sea mejor para los menores».
Zaldívar confió en que en la próxima discusión del Código en materia procesal civil y especialmente en lo familiar, el Congreso aplique una buena reglamentación.
