En un hecho poco común, el Papa Francisco manifestó su tristeza por la “trágica muerte” de la periodista Daphne Caruana Galizia, asesinada el lunes pasado en Malta y quien era conocida por sus denuncias de corrupción.
En un mensaje redactado en inglés, cuyo contenido fue dado a conocer aquí por la sala de prensa del Vaticano, el pontífice manifestó sus condolencias al arzobispo de Malta, Charles Scicluna.
El texto, firmado a nombre del Papa por el “número dos” de la Santa Sede, el secretario de Estado, Pietro Parolin, aseguró las oraciones del líder católico por el “eterno descanso” de la comunicadora y pidió transmitir sus condolencias a la familia.
“El santo padre también asegura su cercanía espiritual a los malteses en este momento difícil, e implora las bendiciones de Dios sobre toda la nación”, estableció el mensaje.
Es la primera vez en muchos años que un Papa manda un telegrama especial con motivo del asesinato de un periodista en extrañas condiciones. Estos mensajes son comunes cuando se trata del fallecimiento de jefes de Estado, políticos destacados, cardenales u otras personalidades.
Caruana Galizia, de 53 años, había liderado una exhaustiva investigación sobre las derivaciones en Malta de los Papeles de Panamá, en sus artículos involucró a altos exponentes del gobierno en la isla.
El lunes 16 de octubre salió de su casa en el pueblo de Mosta, a las afueras de La Valeta, y su coche explotó por causa de una bomba activada a control remoto. El asesinato conmocionó a Europa.
