El yerno del presidente Donald Trump, Jared Kushner, negó haberse coludido con funcionarios rusos durante la pasada campaña presidencial y desestimó la reunión de su cuñado Donald Trump Jr. con una abogada rusa que calificó como una pérdida de tiempo.
En una declaración escrita presentada con anticipación a un encuentro a puertas cerradas que sostendrá este lunes con personal de un panel legislativo, Kushner aseguró haber sido transparente en el proceso para obtener su autorización para acceder a información confidencial del gobierno.
Kushner, quien es asesor especial del presidente Trump al igual que su esposa, insistió en que no tuvo contactos inadeucados.
Kushner detalló los cuatro contactos que tuvo con rusos durante la campaña presidencial y la transición, incluyendo uno con el entonces embajador de Rusia ante la Casa Blanca, Sergey Kislyak, en un céntrico hotel de Washington en abril del 2016.
Aseguró que ese encuentro, se produjo después que fue presentado ante Kislyak y otros tres embajadores que asistieron a la presentación de un discurso sobre política exterior pronunciado por Trump, y negó reportes de prensa de que celebró al menos dos conversaciones telefónicas con el diplomático ruso.