El tenista Rafael Nadal fue homenajeado este domingo en una ceremonia en la pista Philippe Chatrier de Roland Garros, donde recibió un reconocimiento por sus 14 títulos en el torneo parisino, una de las mayores hazañas en la historia del deporte blanco. La ceremonia contó con la presencia de figuras destacadas como Roger Federer, Novak Djokovic y Andy Murray, quienes acompañaron al español en un emotivo acto que conmemoró su legado en la tierra batida.
Durante la ceremonia, el público coreó con entusiasmo «¡Rafa, Rafa!», mientras el speaker del torneo, Marc Maury, recordaba los momentos más memorables de la carrera del tenista, acompañado por un video que rememoró sus 14 años de triunfos en París. Con un traje negro y en solitario en la pista, Nadal se emocionó al escuchar las palabras y al ver las imágenes de sus logros, soltando lágrimas en un momento que quedó grabado en la memoria de los asistentes.
En su discurso, Nadal expresó su gratitud en varios idiomas, comenzando en francés y continuando en inglés y español, en especial al dedicar palabras a su familia y a su equipo técnico. «Muchísimas gracias, no sé por dónde comenzar. Los últimos 20 años he disfrutado, he ganado, he perdido y me he emocionado cada vez que he tenido la suerte de estar aquí», dijo conmovido. Se dirigió especialmente a su tío y entrenador Toni, a quien agradeció por su apoyo y dedicación: “Toni, eres la razón por la que estoy aquí. Gracias por dedicar tanto de tu vida a querer estar conmigo”.
La ceremonia también incluyó la participación de Roger Federer, Novak Djokovic y Andy Murray, quienes compartieron un cálido abrazo con Nadal en señal de camaradería entre los miembros del conocido como Big Four del tenis. Además, la directora del torneo, Amelie Mauresmo, y el presidente de la Federación Francesa de Tenis, Gilles Moretton, descubrieron una placa en honor a los logros del español en la pista, sellando así su legado en el torneo.
Este homenaje llega meses después de un período de reflexión para Nadal, quien no pisaba una cancha desde su derrota en la Copa Davis en Málaga ante Botic Van de Zandschulp y el posterior homenaje de madrugada tras la eliminación de España. A sus casi 39 años, el tenista disfruta de su vida alejado de las pistas, dedicado a su familia y a una academia de tenis reconocida internacionalmente, mientras contempla su futuro en el deporte.
A pesar de no portar raquetas en esta ocasión, Nadal dejó en el aire la posibilidad de futuras participaciones o actividades relacionadas con el tenis, cerrando un capítulo que marcó una época dorada en el deporte mundial.
Con información de Eje Central.
