El pasado jueves, medios italianos dieron a conocer el caso de una mujer que convivió durante más de un año con el cadáver de su madre.
De acuerdo con la información presentada, la Policía dio con el cuerpo momificado de una mujer de más de 100 años que había sido ocultado por su hija en su domicilio, sin notificar su fallecimiento.
El cadáver fue hallado en la cama, cubierto con varias mantas, después de que este miércoles el otro hijo de la mujer alertara que tenía varios días sin poder contactar a su hermana y que algunos vecinos del edificio llevaban tiempo denunciando el fuerte y persistente hedor que se desprendía del apartamento.
El cuerpo de Francesca Pettinato, nacida en 1923, se encontraba en avanzado estado de descomposición, mientras que en la otra habitación estaba su hija, quien no ofreció resistencia ni una explicación clara, aunque declaró que la muerte de su madre ocurrió en septiembre de 2024, dos meses después de cumplir 101 años, por causas naturales.
Las primeras investigaciones apuntan a que la mujer, una empleada pública de 60 años, habría seguido cobrando la pensión de su madre y solicitado permisos laborales para cuidarla cuando ya había fallecido.
El apartamento, que se encontraba en condiciones de insalubridad y abandono, ha sido precintado por las autoridades.
La hija fue trasladada al departamento de Psiquiatría del hospital Papa Giovanni XXIII, donde permanece ingresada. Por el momento, no se han formulado cargos penales en su contra, a la espera del resultado de la autopsia ordenada por la Fiscalía de Bérgamo.