En una sesión de cabildo marcada por la confrontación y la denuncia, las y los regidores de Morena en el Ayuntamiento de Guadalajara expresaron su rechazo al Plan Municipal de Desarrollo 2024-2027, además de denunciar la posible privatización encubierta de parques públicos en la ciudad. Chema Martínez, Juan Alberto Salinas, Teresa Naranjo y Mariana Fernández argumentaron que estas acciones representan una traición a las familias tapatías y un retroceso en la protección del patrimonio público.
Durante la sesión, los representantes de Morena señalaron que el plan en cuestión favorece intereses privados y favorece una visión excluyente de la ciudad, priorizando el turismo y los negocios inmobiliarios sobre las necesidades sociales. Chema Martínez, líder de la bancada, afirmó que el documento carece de soluciones a problemáticas fundamentales como la pobreza, la inseguridad y el acceso a servicios básicos, y acusó que el plan busca beneficiar a empresarios en detrimento de las comunidades más vulnerables.
“Este plan es una estrategia de marketing político. Para la selfie, pues”, expresó Martínez, quien además criticó que el proyecto reproduce la visión de administraciones anteriores que favorecen el desarrollo inmobiliario en lugar del bienestar social. “Privatizan el espacio público, desplazando a las familias. No hay una sola política que atienda las necesidades de las mujeres, los jóvenes o los adultos mayores del oriente de Guadalajara”, agregó.
Por su parte, Juan Alberto Salinas denunció que el plan representa la continuidad de un modelo de negocio con lo público. “Todo se reduce a hacer negocio privado con lo que es de todos”, afirmó, señalando la delegación de decisiones a instituciones como IMEPLAN y la reducción del 50% en el presupuesto de obra pública. El regidor advirtió que estas acciones profundizan las desigualdades sociales y llamó a Morena a defender la soberanía de Guadalajara frente a intereses privados.
En materia ambiental, Teresa Naranjo, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, criticó el proceso de privatización de parques y alertó sobre los convenios de comodato con la Agencia de Bosques Urbanos. “Nuestros parques no se rentan, se cuidan”, afirmó, exigiendo la reversión de estos acuerdos y mayor participación ciudadana en la gestión de estos espacios. Naranjo denunció el abandono y la falta de transparencia en el manejo de áreas verdes en colonias populares.
La discusión también abordó la ilegalidad del comodato que busca entregar ocho parques públicos a intereses privados. Chema Martínez recordó que la legislación vigente prohíbe ceder bienes de dominio público en comodato y advirtió que estas acciones podrían facilitar la privatización de los espacios verdes. “Un parque privatizado no solo cobra entrada, también elimina la igualdad y excluye a quienes no pueden pagar. Eso es profundamente injusto y lo vamos a detener”, afirmó.
La postura de Morena en Guadalajara deja en evidencia una visión clara: la defensa del patrimonio público y la resistencia a un modelo que prioriza los negocios y la imagen por encima del bienestar social. Mientras algunos buscan posicionarse con campañas de marketing, las y los regidores morenistas reafirmaron su compromiso con la justicia social y la protección de los derechos de las familias tapatías.
Este enfrentamiento refleja la tensión existente en la administración local, donde la lucha por mantener los espacios públicos y garantizar una ciudad más inclusiva y equitativa sigue vigente. En palabras de Chema Martínez, “Guadalajara no se entrega, se defiende”.