Después de 17 años, el 27 de agosto pasado, Místico descendió las escaleras de la Arena México con su tradicional máscara en plata y oro con un cáliz, colores y figura que recuerdan el origen católico del personaje, confiado en cumplir un viejo presagio de revolucionar otra vez la lucha libre.
«Dicen las leyendas vivientes de la lucha libre que cada 20 años salen los ídolos y yo creo que por algo regresé al personaje en 2021», respondió Místico este domingo a Efe cuando se le cuestionó por qué desde que dejó ese nombre no ha habido otra gran figura en el pancracio.