Un inicio prometedor en la era interina de Jaime «Jimmy» Lozano al frente del TRI se dio esta noche en Houston al vencer 4 a 0 a la selección de Honduras en el primer encuentro de la Copa Oro de la CONCACAF.
De forma por demás «milagrosa» el conjunto mexicano se olvidó de jugar mal, de defender poco, de tirar pelotazos y justificar sin argumentos, hubo jugadores que amenazaron con abandonar el llamado, como si fuese tan sencillo el volver a comprarles vuelos a los que se van y a los que los sustituyen, como si mandar una lista nueva de convocados a la FIFA y la CONCACAF fuera cosa de un archivo de excel.
Si no quieren, que nunca más sean convocados, si la consigna de clubes y representantes era tenderle la cama a Diego Martín Cocca lo hicieron y muy bien, para nada se pueden echar campanas al vuelo cuando jugaste sí, mucho mejor que en tus últimos 4 partidos, pero tuviste enfrente a la peor selección de Honduras de muchísimos años, Carlos Pavón como comentarista del encuentro en la transmisión de TUDN USA, no tuvo empacho en reconocer que la selección de la que él fue un verdadero ídolo, se encuentra en una etapa de dar pena, por ello de que los porristas con micrófono alardeen de que el malo de la película era Cocca y los héroes hoy son los seleccionados está por verse.
Cierto y claro está sin demeritar a Lozano, el planteamiento de juego fue vistoso y muy ofensivo, los cambios en el once inicial se vieron bien trabajados pese a lo corto de los entrenamientos desde su llegada, ahora México se enfrentará a Haití que también viene de ganarle a Qatar, seguramente veremos al tricolor en la siguiente ronda y ahí veremos si es la mano del entrenador, si son los jugadores o el milagro está hecho.
Por lo pronto México ganó, goleó y a muchos ya los encandiló.
