Las intensas lluvias y la creciente del río Guadalupe provocaron una tragedia en Texas, con un saldo preliminar de 53 fallecidos y múltiples personas desaparecidas, entre ellas 23 niñas y jóvenes que participaban en un campamento cristiano en Kerr. La emergencia ha movilizado a las autoridades locales y estatales, quienes continúan las labores de búsqueda en una situación que sorprendió por su magnitud y por la discrepancia en las predicciones meteorológicas.
El fenómeno meteorológico ocurrió en la madrugada del 4 de julio, cuando las lluvias acumuladas en la región de Hill Country superaron los 30 centímetros, elevando el caudal del río Guadalupe a niveles históricos de 9.9 metros, casi el doble de las previsiones iniciales. La inesperada intensidad de las precipitaciones generó inundaciones severas que arrasaron comunidades rurales, afectando particularmente al campamento Camp Mystic, ubicado cerca de Hunt.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró el estado de emergencia en la zona afectada y afirmó que las labores de búsqueda y rescate continuarán hasta localizar a todos los desaparecidos. La escuela primaria de Ingram fue habilitada como centro de reunificación para facilitar la atención a los familiares afectados.
Testigos y familiares relataron la magnitud del desastre. Nora Gómez, madre de una joven universitaria que trabajaba en el campamento, expresó su angustia tras ver las imágenes de destrucción y la incertidumbre sobre el paradero de su hija. “Nunca crees que te va a pasar a ti”, comentó, reflejando el impacto emocional del suceso.
Las autoridades advierten que la cantidad de lluvias superó ampliamente las predicciones previas, que estimaban precipitaciones entre 7 y 15 centímetros. La discrepancia en los pronósticos generó preocupación y complicó las tareas de preparación y respuesta en una región que suele ser vulnerable a estos eventos climáticos extremos.
Hasta el momento, la búsqueda de los desaparecidos continúa, y las autoridades locales hacen un llamado a la población para mantenerse alertas ante posibles nuevas inundaciones. La tragedia en Kerr se suma a las historias de familias que enfrentan la pérdida y la incertidumbre en medio de una de las inundaciones más severas en la historia reciente del estado.
Fuentes: EFE, declaraciones oficiales, redes sociales de autoridades estatales y testimonios de afectados.