La variante delta supuso más del 93 % de los nuevos casos de covid-19 en Estados Unidos durante las dos últimas semanas de julio, de acuerdo a los datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
En concreto la mutación delta del virus y sus diferentes subvariantes estuvo detrás del 93% de los casos que fueron secuenciados en esas dos semanas.