El funeral de Jean-Paul Belmondo, uno de los actores más importantes del último siglo en Francia, se celebró este viernes en la iglesia parisina de Saint-Germain-des-Prés, en lo que fue la última despedida al intérprete.
La ceremonia íntima, sin cámaras de televisión y que contó apenas con los allegados al actor, se prolongó durante un poco más de dos horas y atrajo también a cientos de seguidores de Belmondo. Por expreso de su familia, un puñado de estos anónimos admiradores fueron también invitados al interior del templo.