Inicio ECONOMÍA La ropa inteligente facturará 135 millones en 2018 en el mundo

La ropa inteligente facturará 135 millones en 2018 en el mundo

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Las ventas de productos de tecnología incorporada a la ropa, la denominada «wearables’ (ropa inteligente o dispositivos ponibles), alcanzarán los 135 millones de euros (unos 147 millones de dólares) en 2018 en el mundo, auguran expertos internacionales que se reunirán en Barcelona esta semana.

En el encuentro está previsto que se analicen las oportunidades de este tipo de tecnología.

Los expertos calculan que las oportunidades que ofrecen la ropa y los tejidos inteligentes y funcionales harán que las ventas pasen de los 9,7 millones de euros obtenidos en 2013 en todo el mundo -5,2 sólo en EE.UU- a 135 millones en 2018.

Los textiles inteligentes, con una demanda que llega al 75 % en el caso de los jóvenes, «ofrecen importantes oportunidades gracias al desarrollo en la miniaturización de componentes electrónicos», explicó el investigador en diseño textil Oscar Tomico, coordinador del encuentro.

Según Tomico, «los tejidos funcionales ya se pueden ver en geotextiles, arquitextiles y agrotextiles, pero también en la indumentaria profesional o en aplicaciones deportivas y en el campo de la salud».

Para que este futuro pueda convertirse en una realidad, según Tomico, «es necesaria una gran transformación en la que participen agentes de múltiples disciplinas y niveles», donde «la innovación debe formar parte tanto del proceso de producción como del proceso de diseño o de los modelos de negocio».

El encuentro está organizado por la embajada holandesa en España, en colaboración con ADI-FAD (Asociación de Diseño Industrial del Fomento de las Artes y del Diseño, con sede en Barcelona), Eindhoven University of Technology y Eurecat (centro tecnológico de Cataluña).

Este foro contará con la participación de expertos del mundo textil, el diseño de moda o textil y expertos en ‘wearables’ o tecnología aplicada al sector textil.

Según los expertos, «es una revolución del textil, impulsada por los nuevos materiales, procesos de producción y canales, la proliferación de datos, dispositivos y sensores y la hiperconectividad».