El partido que todo mundo esperaba la tarde del miércoles era la vuelta de la semifinal de la Champions League entre el Manchester City y el Real Madrid. En la ida habían empatado a un tanto en el Santiago Bernabéu, los merengues llegaban confiados a Manchester por la inercia ganadora en el certamen.
La máquina más que afinada y aceitada de Pep Guardiola comenzó a jugar de manera espectacular desde el arranque del juego, al 23 se marcó el primer gol del encuentro con un gran remate de Bernardo Silva, solo 15 minutos después, el portugués lograría marcar su segundo gol del partido con un gran remate.
El arquero Courtois fue decisivo para evitar que cayeran al menos 3 goles más en el primer tiempo, evitando en dos ocasiones goles cantados de Earling Halland que se iría en blanco.
Corría el minuto 76 cuando caería el tercer gol del encuentro con un desvío de Éder Miitao a su propia portería, el argentino campeón del mundo Julián Álvarez cerraría la llave con el cuarto gol del encuentro y una gran definición en el mano a mano ante el arquero Belga.
La final de la Champions League se disputará en el Estadio Olímpico Atatürk, en Estambul, Turquía. Manchester City e Inter buscarán levantar la orejona, los ciudadanos lo harían por primera ocasión, una copa que desde la llegada de Guardiola han buscado incesantemente y esta vez tienen una segunda oportunidad.
