El español Antonio Ferrera cortó dos orejas mientras que los mexicanos Diego Silveti y Diego San Roman lograron una cada uno en la Corrida Guadalupana de la plaza Monumental de la Ciudad de México con un gran lleno en los tendidos.
Los toros de Bernaldo de Quirós tuvieron más kilos que trapío, pero destacaron primero y quinto por su nobleza, mientras que los de Fernando de la Mora fueron descastados.