Una enorme masa de polvo proveniente del Sahara se desplazará sobre el Océano Atlántico y alcanzará el sur y centro de Florida este sábado 31 de mayo, según pronósticos de la NOAA y reportes de CBS. Este fenómeno, conocido como la Capa de Aire Sahariano (SAL, por sus siglas en inglés), es habitual en los meses de verano, aunque su intensidad actual podría tener implicaciones en la salud, el clima y la temporada de huracanes en la región.
Recorrido y fechas clave del fenómeno
El monitoreo de la nube de polvo comenzó a principios de esta semana, evidenciando su progresión desde diferentes puntos del Caribe y el sur de Estados Unidos:
- Puerto Rico e Islas Vírgenes: cielo brumoso y menor visibilidad desde el martes 27 de mayo.
- Sur de Texas: primeras concentraciones detectadas el lunes 26 de mayo.
- Florida: llegada prevista para el sábado 31 de mayo, afectando principalmente las zonas centro y sur.
- Segunda oleada: posible aumento en la intensidad, estimada para mediados de la próxima semana.
Efectos en salud y clima
El paso de esta nube de polvo puede generar diversos efectos en la región:
- Cambios visuales en el cielo: dispersión de la luz solar que produce amaneceres y atardeceres con tonos rojizos y anaranjados más intensos.
- Reducción de la visibilidad: especialmente en áreas costeras y donde la concentración de polvo sea mayor.
- Impactos en la salud respiratoria: riesgo para personas con asma, alergias, irritación ocular y nasal.
- Influencia en el clima: el aire seco y cálido asociado a la SAL puede suprimir la formación de tormentas tropicales, afectando la temporada ciclónica en el Atlántico.
Origen y características de la nube de polvo del Sahara
La SAL se forma sobre el desierto del Sahara, donde masas de aire extremadamente secas y cargadas de partículas minerales, como hierro, fósforo, calcio y silicio, son arrastradas por los vientos alisios a través del océano Atlántico. Estas nubes pueden recorrer más de 8,000 kilómetros, transportando millones de toneladas de polvo en suspensión.
Además de su impacto en la salud y el clima, estas partículas cumplen funciones ecológicas importantes: fertilizan los suelos del Amazonas y contribuyen a su biodiversidad. Sin embargo, también pueden afectar la calidad del aire en regiones lejanas del Sahara.
El fenómeno, que suele presentarse entre junio y agosto, tiene un impacto significativo en la atmósfera del Atlántico. La NASA señala que, aunque puede ser perjudicial para la salud respiratoria, el polvo también ayuda a fertilizar ecosistemas lejanos y a modificar las condiciones atmosféricas que influyen en la formación de huracanes.
Este fin de semana, Florida vivirá la llegada de una de estas extensas nubes de polvo, una manifestación natural que, además de sus efectos inmediatos, puede tener repercusiones en la dinámica de la temporada ciclónica y en la calidad del aire en la región.