Fuera de la Presidencia de EE.UU. y de Twitter, Donald Trump perdió protagonismo en los primeros 100 días del Gobierno de Joe Biden, pero todo puede cambiar cuando tenga su propia red social y arranque la campaña de las elecciones legislativas de 2022, antesala de unas presidenciales en las que no ha descartado ser candidato.
Un Trump que de la noche a la mañana pasó de omnipresente a invisible, luego a ser visto solo esporádicamente, ha seguido dando zarpazos a los demócratas y a Biden desde Florida, pero con mucha menos frecuencia y eco que cuando tuiteaba sin freno.