El Departamento de Salud de Florida, liderado por Joseph A. Ladapo, anunció su intención de eliminar todos los requisitos de vacunación para los estudiantes que asisten a las escuelas públicas y privadas del estado. La medida, que busca poner fin a una práctica que ha sido estándar en Florida durante décadas, ha generado un intenso debate en la comunidad educativa y sanitaria.
Durante una rueda de prensa en la escuela cristiana Grace, en Valrico, Ladapo, un médico formado en Harvard y nacido en Nigeria, expresó que las imposiciones de vacunas “rebosan desprecio y esclavitud”. “El Departamento de Salud de Florida, en colaboración con el gobernador Ron DeSantis, trabajará para poner fin a todos los mandatos de vacunación en Florida, todos, hasta el último de ellos”, afirmó.
El funcionario argumentó que la decisión se basa en el respeto por la autonomía individual y la libertad de decidir qué se pone en el cuerpo. “¿Quién soy yo para decirle qué debería poner en su cuerpo?”, cuestionó. “Su cuerpo es un regalo de Dios”.
Esta iniciativa sitúa a Florida como el primer estado en Estados Unidos en considerar oficialmente la eliminación de la obligatoriedad de vacunas para la escolarización, rompiendo con décadas de políticas que han exigido inmunizaciones contra enfermedades como sarampión, rubéola y hepatitis, entre otras.
La propuesta de Florida coincide con las posturas de figuras como Robert Kennedy Jr., quien ha expresado escepticismo respecto a las vacunas y actualmente lidera el Departamento de Salud de Estados Unidos en un contexto de debate sobre la seguridad y la libertad en torno a la vacunación.
La decisión de Florida refleja un cambio de paradigma en la política sanitaria del estado, que en las últimas décadas ha sido pionero en la implementación de requisitos de vacunación para garantizar la salud pública. La posible eliminación de estas exigencias abre un nuevo capítulo en la discusión sobre derechos individuales versus protección colectiva en el ámbito de la salud.