El gobierno de Florida anunció que apelará la decisión judicial que ordena el cierre del centro de detención migratoria conocido como ‘Alligator Alcatraz’, argumentando que la jueza Kathleen Williams habría excedido sus competencias. La resolución, emitida por el Distrito Sur de Florida, establece un plazo de 60 días para desmantelar las instalaciones ubicadas al oeste de Miami, donde actualmente permanecen 336 migrantes detenidos.
La oficina del fiscal general de Florida, liderada por James Uthmeier, criticó la legitimidad de la jueza Williams, quien también prohibió la ampliación de infraestructura en el sitio, alegando que la orden afectaba áreas protegidas en los Everglades. En sus declaraciones, el portavoz Jeremy Redfern afirmó que la apelación se basa en que la decisión “se excede en su autoridad” y calificó la fallo como “ilegal”.
Por su parte, el equipo del gobernador Ron DeSantis, un republicano, aseguró que las deportaciones en ‘Alligator Alcatraz’ continuarán pese a la orden judicial. Alex Lanfranconi, director de Comunicaciones del gobernador, afirmó que “las deportaciones continuarán hasta que la moral mejore”, en referencia a la política migratoria del estado.
El centro, inaugurado el 3 de julio en un aeropuerto abandonado en medio de los humedales de los Everglades, ha sido objeto de controversia tanto legal como ambiental. Organizaciones ambientalistas como Friends of The Everglades y el Center for Biological Diversity, junto con la tribu Miccosukee, solicitaron su cierre total, alegando que la presencia del centro perjudica el ecosistema, que alberga especies en peligro de extinción como panteras, caimanes y cocodrilos.
La jueza Williams falló parcialmente a favor de estos grupos, prohibiendo la instalación de nuevas infraestructuras y cualquier actividad que altere el entorno natural. La orden también impide la entrada de personas adicionales al sitio, salvo los migrantes ya detenidos.
El caso ha generado un intenso debate en torno a la política migratoria y la protección ambiental en Florida. Mientras tanto, las autoridades aseguran que las deportaciones y operaciones en ‘Alligator Alcatraz’ continuarán, en un contexto de tensiones legales y sociales que aún están por resolverse.
Con información de EFE.
