Mario Ramírez Treviño, conocido como «El Pelón» o «X20», ex líder del Cártel del Golfo, falleció el pasado 13 de marzo en una prisión federal de Estados Unidos, donde se encontraba bajo custodia tras su extradición en 2017. El Departamento de Justicia de EE. UU. confirmó la noticia y solicitó al tribunal del Distrito de Columbia desestimar la imputación en su contra, aunque no se han revelado las causas de su muerte.
Ramírez Treviño, que asumió el mando del cártel tras la detención de Eduardo Costilla Sánchez en 2012, fue capturado en un operativo militar del Ejército mexicano en 2013 en Tamaulipas. Desde entonces, su figura había estado en el centro de la atención tanto de las autoridades estadounidenses como mexicanas, siendo considerado uno de los criminales más buscados.
Durante su carrera delictiva, «El Pelón» fue conocido por su vinculación con actividades violentas y su rol clave en la lucha entre el Cártel del Golfo y Los Zetas. Su captura fue recompensada con 5 millones de dólares por parte del Departamento de Justicia de EE. UU., mientras que la entonces Procuraduría General de la República de México ofreció 30 millones de pesos por información que facilitara su arresto.
Ramírez Treviño también había colaborado como testigo en el caso de Rubén Oceguera González, conocido como «El Menchito», hijo del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación. La muerte de este narcotraficante marca un capítulo más en la compleja historia del narcotráfico en México y sus repercusiones en la seguridad de la región.
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