El expresidente de Argentina, Alberto Fernández (2019-2023), fue denunciado por su expareja y madre de su hijo, Fabiola Yáñez, por violencia física y hostigamiento.
Consultado por EFE sobre la denuncia, el político se limitó a comentar que «es un momento muy ingrato» y que por lo pronto, no hará declaraciones en los medios.
Ante la denuncia de Yañez, el juez que lleva el caso, Julián Ercolini, ordenó de inmediato medidas de “restricción” y “protección” en favor de ella para que los presuntos hechos a los que aludió no se reiteren. Las medidas que se tomaron, de carácter urgente, incluyen la orden al expresidente de no acercarse a ella.
Por su parte, el Alberto Fernández, informó que está preparando “un comunicado” y que lo que incluya en él es todo lo que dirá. “El resto lo haré ante la Justicia. Es todo falso. Pero todo lo demostraré ante la Justicia”, afirmó.
Por otro lado, el abogado de Fabiola Yáñez, Juan Pablo Fioribello, aseguró que había hablado con su clienta: “La noté muy angustiada y me dijo: ‘No aguanto más esta situación, lo acabo de denunciar’. Ella se comunicó directamente con Ercolini y le dijo: ‘Quiero levantar el archivo de las actuaciones y quiero realizar una denuncia penal por los golpes y las amenazas que recibo’”.
Fioribello había confirmado días antes la existencia de chats y fotografías, que datan de la época en la que Fernández era presidente, y que daban detalles sobre al menos una discusión entre el exmandatario y su pareja, pero había asegurado en ese momento que Yáñez había rechazado presentar una denuncia formal y negado que hubiera habido violencia física involucrada.
La justicia argentina había archivado la causa ya que, por tratarse presuntamente de un delito de instancia privada, si la víctima no lo denuncia, no puede intervenir.
